SE CONSUMÓ LA PERDIDA DE PODER ADQUISITIVO DE LOS EMPLEADOS PÚBLICOS CANARIOS
El pasado viernes, 25 de septiembre, el Ministerio de Administraciones Públicas (MAP) firmó con los sindicatos estatales UGT, CCOO y CSIF el Acuerdo Para la Función Pública Para el Período 2009-2012. Este acuerdo, lamentablemente, vuelve a suponer un nuevo hito más en un triste y largo proceso de perdida de poder adquisitivo en las retribuciones de los empleados públicos estatales, y por su aplicación directa, de los canarios.
Antecedentes
La mala situación económica que estamos atravesando ya hacía temer, tal como se ha visto confirmado, que iba a traernos malas noticias para nuestros bolsillos, si bien manteníamos la esperanza de que no fueran a ser tan malas.
Para INTERSINDICAL CANARIA la propuesta de congelar las retribuciones por debajo del 1% para el año 2010 era un claro ataque a las condiciones laborales y económicas del conjunto de personal que trabaja en las diferentes administraciones públicas. Este personal, que, fruto de una reiterada política de contención salarial, ha perdido un 14,3% de poder adquisitivo desde el año 1991, no pensamos que era merecedor de un nuevo castigo económico como el que ha sufrido. (Os adjuntamos un cuadro facilitado por nuestros compañeros de INTERSINDICAL VALENCIANA donde se recoge gráficamente dicha pérdida de poder adquisitivo, también en muchos de los momentos en que la economía iba viento en popa ¿Qué hicieron entonces los mismos sindicatos?).
AÑO | INCREMENTO IPC | INCREMENTO SALARIAL | PÉRDIDA DE PODER ADQUISITIVO | PORCENTAJE DE SALARIO RESPECTO A 1991 |
1990 | | | | 100 |
1991 | 5,5 | 5 | - 0,5 | 99,5 |
1992 | 5,3 | 5 | - 0,3 | 99,2 |
1993 | 4,9 | 1,8 | - 3,1 | 96,1 |
1994 | 4,3 | 0 | - 4,3 | 91,8 |
1995 | 3,5 | 3,5 | - 0,8 | 91,0 |
1996 | 3,2 | 3,5 | 0,3 | 91,3 |
1997 | 2 | 0 | - 2 | 89,3 |
1998 | 1,4 | 2,1 | 0,7 | 90 |
1999 | 2,9 | 1,8 | - 1,1 | 88,9 |
2000 | 4 | 2 | - 2 | 87,9 |
2001 | 2,7 | 2 | - 0,7 | 87,2 |
2002 | 4,1 | 2 | - 2,1 | 85,1 |
2003 | 2,4 | 2,7 | 0,3 | 85,4 |
2004 | 3,4 | 2,7 | 0,7 | 86,1 |
2005 | 3,5 | 2,7 | - 0,8 | 85,3 |
2006 | 2,6 | 2,7 | 0,1 | 85,4 |
2007 | 4,3 | 3 | -1,3 | 84,1 |
2008 | 1,4 | 3 | 1,6 | 85,7 |
INTERSINDICAL CANARIA consideraba que el Gobierno tenía otros mecanismos para recaudar dinero en vez de pagar, una vez mas, el personal del sector público por la situación económica que atraviesa el estado. Una fiscalidad progresiva o la lucha contra el fraude fiscal eran algunas de las posibilidades que podrían haberse puesto en marcha, y ello por no hablar de las importantísimas cantidades de dinero entregadas a la banca. Entendiendo, en cualquier caso, que una congelación salarial no era una solución propia de un gobierno progresista y solidario.
Igualmente, la Secretaría de Comunicación de este sindicato aconsejaba, allá por el mes agosto, al Gobierno español y a los sindicatos CCOO y UGT que establecieran medidas para dar fin al elevado diferencial de salarios existentes entre los trabajadores canarios (de todos los sectores en general; tanto públicos como privados) y sus homónimos del resto del estado (cerca del 6% de diferencia), y les requería para dejar a los trabajadores canarios fuera de cualquier congelación salarial que pudiera acordarse.
Igualmente, los tres sindicatos firmantes de este acuerdo manifestaban hace bien poco tiempo que “no aceptarán una congelación de los salarios de los funcionarios y empleados públicos para 2010, ya que consideran que llevan años perdiendo poder adquisitivo de forma continua; es más, pedirán aumentos por encima del 2%, como mínimo” . La Secretaria federal del sector de la Administración General del Estado de FSP-UGT, Y. P., se manifestó así respecto a la posibilidad de una cláusula de revisión salarial “considera que la cláusula de revisión no tendría efectividad ya que el incremento salarial de los funcionarios lo fija la ley de presupuestos. En su opinión, el objetivo debe ser lograr aumentos superiores al IPC en la mesa de negociación, para que así lo recojan los presupuestos.” Igualmente, por el representante de CCOO, E.C., se planteó solicitar “que los salarios crezcan según el objetivo de inflación, más lo que permita la productividad, lo que arrojaría un alza superior al 2%.” "Aceptaremos que sea limitada, pero que sea una subida. Pelearemos esta propuesta y a partir de ahí ya veremos si hay que movilizarse". (Fuente: expansión.com del 20 de julio).
El contenido económico del acuerdo
Lamentablemente, a pesar de todo lo expuesto anteriormente, finalmente se ha alcanzado un acuerdo de incremento del 0,3% para el próximo año, porcentaje que queda lejos del consenso de los analistas que prevén para el próximo año una inflación que puede estar en torno al 1,6%. En dicho acuerdo, a pesar de tener un alcance temporal hasta el 2012, no se hace referencia a los incrementos concretos para dichos períodos (2011 y 2012).
Es cierto que el acuerdo establece una cláusula de revisión salarial aplicable en el año 2012 (también en el 2013) para el caso de que los trabajadores pierdan poder adquisitivo (¿acaso alguien lo duda?) en 2010 y 2011; sin embargo, dicha cláusula no nos parece suficiente garantía, dándonos la sensación de tener un papel más virtual que real, y ello por la siguientes razones:
- Porque su potencial eficacia se desarrolla a partir del año 2012 con lo que para los próximos dos años tendremos ya que conformarnos, en todo caso, con los exiguos incrementos que se adopten (0,3% para el 2010), y ello sea cual sea la gravedad de la pérdida del poder adquisitivo que experimentemos.
- Porque su aplicación y concreción depende de muchos parámetros (evolución presupuestaria, incremento del IPC, crecimiento económico, capacidad de financiación de los PGE y la valoración del aumento de productividad del empleo público), demasiadas variables para su correcta aplicación y eficacia, que quedará, en gran medida, en manos del gobierno de turno.
- Además, al final nos pueden aplicar el artículo 38, punto 10, del Estatuto Básico del Empleado Público (EBEP) referido a la suspensión por temas económicos de los Acuerdos firmados, quedando en mero papel mojado esta supuesta garantía.
Es cierto que dicho acuerdo contiene otros aspectos, algunos de ellos positivos; pero, por un lado, tienen un carácter demasiado abstracto y programático en la mayoría de los casos –siendo poco más que simples declaraciones de principios-, y, por otro, son cuestiones que debieran tratarse, negociarse y regularse en cualquier caso, independientemente de la existencia o no de este acuerdo. Lo que sí han asegurado los sindicatos firmantes es que queden meridianamente claras algunas cuestiones que sí favorecen claramente sus intereses, así podemos referirnos a las siguientes:
- El mantenimiento de las aportaciones a los planes de pensiones (0,3% de la masa salarial para el 2010; 0,5% para el 2011 y 0,7% para el 2012), que sirven cuantitativamente de muy poco a cada empleado público, pero que benefician directamente a las entidades gestoras de los mismos, siendo, casualmente, UGT y CCOO gestores del mayor Plan de Pensiones que existe en la Administración Pública. Respecto a dicha situación nos hubiera parecido más adecuado, dado lo exiguo de los incrementos retributivos pactados, que las cantidades que obligatoriamente se aportan a dichos planes hubieran ido directamente a nuestras nóminas.
- La potenciación de la formación continúa que supondrá una mayor participación de los sindicatos firmantes en la intermediación y realización de los cursos, lo que mejorará sus actuales beneficios en esta materia. Desde INTERSINDICAL CANARIA abogamos por una formación pública íntegra y completa a instancias de las diferentes administraciones, y no como una fórmula disfrazada de financiación sindical.
· La centralización de la negociación colectiva, que excluirá de la negociación a una parte importante de los sindicatos representativos en diferentes ámbitos nacionales y autonómicos, lo que, junto con la negociación encubierta del desarrollo de las cuestiones recogidas en el acuerdo, a través de la comisión de seguimiento del mismo, permitirá hurtar de su legítima mesa de negociación las cuestiones pactadas, dejando fuera de este proceso a los sindicatos con representación en la misma y no firmantes de este acuerdo.
La cuestión canaria
Ya habíamos denunciado desde INTERSINDICAL CANARIA de la especial situación de debilidad salarial de los trabajadores canarios en general. Además, en especial en cuanto a la función pública se refiere, existen, principalmente en las corporaciones locales, un alto número de mileuristas con sueldos de escasa cuantía. Igualmente, los trabajadores de sectores como la sanidad o la educación canaria, al igual que los trabajadores del sector privado, mantienen en la actualidad unos salarios por debajo de la media estatal y, para mayor añadido, con una ratio de pacientes o alumnos por trabajador, muy por encima de la media estatal.
En la administración de justicia, la cosa tampoco mejora mucho pues, a fecha de hoy, las retribuciones de los funcionarios de justicia en Canarias son las más bajas de todos los ámbitos territoriales del estado. Y eso que, en lo que a justicia se refiere, ha sido el progresivo proceso de transferencias a favor de las CCAA, al que precisamente han puesto multitud de pegas y obstáculos en numerosas ocasiones los sindicatos firmantes del acuerdo ahora analizado, con su componente retributivo–es decir, la existencia de retribuciones fijadas y acordadas a nivel de CCAA, y concretadas actualmente en Canarias en el denominado complemento específico (388,58 € en el año 2009)-, lo que ha salvado del mileurismo a muchos funcionarios de justicia canarios.
Y todo ello, sin haber hecho mención hasta ahora a las reformas impositivas a realizar por el ejecutivo estatal, que, según un estudio del sindicato GESTHA (Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda) supondrán que los contribuyentes canarios tendrán que desembolsar una media de 494 euros más al año en concepto de impuestos a raíz de la subida fiscal anunciada por el ejecutivo estatal. (Fuente: eldía.com del 6 de octubre).
Todo lo expuesto, nos lleva a un panorama de un incremento salarial casi nulo para el próximo año, con una previsión posible de IPC superior al 1,6%, y con un incremento de carga tributaria muy superior al triste y exiguo incremento salarial pactado. En fin, que con el beneplácito de algunos, vamos como los cangrejos, hacía atrás.